viernes, 11 de noviembre de 2016

"Barbacana hacia Aragón en Castellana Tierra" - La vertiente Soriana del Moncayo y la comarca del Aranda

"Es la tierra de Soria árida y fría.
Por las colinas y las sierras calvas,
verdes pradillos, cerros cenicientos,
la primavera pasa
dejando entre las hierbas olorosas
sus diminutas margaritas blancas.

La tierra no revive, el campo sueña.
Al empezar abril está nevada
la espalda del Moncayo;
el caminante lleva en su bufanda
envueltos cuello y boca, y los pastores
pasan cubiertos con sus luengas capas.(...) "


Extracto de Campos de Soria, de Antonio Machado.

VALDENEBRO - ZARAGOZA 266 kms.
La Cruz de Canto Beratón

Esta es la tercera y última etapa que realicé el pasado martes 1 de noviembre de 2016 de mi viaje por Soria y los Pueblos Negros de Guadalajara. Se trata de una ruta muy sencilla y muy parecida a la del viaje de ida (http://avueltasconlamoto.blogspot.com.es/2016/11/el-moncayo.html ), con la diferencia de que la vuelta la hice por el Moncayo, pero por la parte sur, cruzando la Sierra del Moncayo hasta coronar el techo de la provincia numantina: Beratón, situado a nada más y nada menos que 1.395 mts. de altitud.



Arranco a eso de las 10:00 de la mañana; no soy muy madrugador y hoy que era día de vuelta a casa después de estar unos días de puente se pegaban las sábanas más de lo normal. La mañana está despejada y hace una temperatura muy agradable para poder andar en moto y no llegar a casa como un flas de piña.
Parto de Valdenebro hacia el Burgo de Osma donde aprovecho para repostar y desde ahí encaro hacia Soria capital por la N-122. Serán unos 70 kms hasta la circunvalación y ahí más de lo mismo para continuar por la N-122 en dirección Ágreda/Ólvega y que nos meterá de lleno en la Comarca del Moncayo.

El Moncayo y Ólvega
Continúo por esta vía hasta el alto del Madero desde el cual se divisa imponente el Moncayo recortando su silueta en la lejanía que marca la frontera entre Castilla y Aragón. Justo en la cima del puerto hay que estar atentos y no embalarse demasiado en la bajada, pues ahí mismo es donde debemos tomar el desvío de la SO-P-2001 que nos llevará hacia Ólvega en una carretera ancha y ligeramente curveada (no olvidemos que es el descenso del Madero por la cara sur) en la zona de "las curvas del ocho"que transita entre un denso pinar muy poco concurrido que irá clareando poco a poco hasta llegar a las inmediaciones de Ólvega, rodeada de tierras de cultivo y explotaciones ganaderas.
Callejeo un poco por Ólvega y atravieso el pueblo hasta llegar al cruce con la CL-101 que hacia la izquierda nos llevará a Ágreda y hacia la derecha hacia Noviercas. Giro a la derecha dirección Noviercas y en apenas cuatro kilómetros subiremos el Puerto de la Carrasca (1.187 mts), que se trata del típico alto salvado por una carretera nacional, con pendiente suave y apenas curveado al menos en el trozo que recorreremos nosotros, pues (otra vez) justo en la cima debemos tomar el desvío a la izquierda que nos manda directos a Cueva de Ágreda.

Tomamos la SO-P-2106, una vía secundaria bastante apañada que curvea ascendiendo poco a poco por las faldas del Moncayo, que en esa latitud se muestra pelado y salpicado por algún que otro matorral y alguna carrasca solitaria.
Tras 6 kilómetros por esta carretera cruzamos Cueva de Ágreda (a 1.290 mts.), un pueblo singular que toma su nombre de la pintoresca cueva que lo corona y en la cual se dice que es el lugar en el que el gigante Caco escondió los bueyes que robó a Hércules. Como castigo, éste lo sepultó bajo un montón de piedras, creando así la sierra del Moncayo.

Cruzo Cueva de Ágreda y emprendo el tramo de 10 kms que me separan de la siguiente localidad: Beratón.
Como aquel que no quiere la cosa hemos subido bastante y el paisaje empieza a variar de forma drástica y la carretera me acompaña junto a la dehesa que bebe de las aguas del Molinos y el Aravianas y que empieza a levantar imponentes masas de robles, carrascas y pinos. También notaremos cómo la carretera se estrecha ligeramente y empeora en la calidad de su pavimento. No hay que olvidar que no estamos haciendo otra cosa que ganar altura y esta es una zona en la que no es raro que la carretera sufra las inclemencias del temporal de forma mucho más acusada, sufriendo nevadas, heladas y el paso de las quita-nieves.

La Dehesa de Cueva de Ágreda

Me detengo a un lado de la Cruz de Canto, uno de los enclaves más icónicos de Beratón (1.395 mts.) y ahí contemplo por un momento las vistas desde este "techo", que más bien me hace las veces de "balcón" de la provincia soriana. Desde ahí, en un lugar tan alejado de las grandes ciudades se respira un aire puro y una tranquilidad que en muy pocos otros lugares he llegado a sentir. Puede que sea uno de los pueblos menos poblados que he conocido, pero desde luego es el pueblo más hospitalario que jamás he conocido; de eso no me queda ninguna duda. Ahí, las cosas toman una dimensión muy distinta entre historias de bandidos (el Chupina), robledales sagrados de los celtíberos (según los Epigramas del autor romano Marcial) y las pisadas de lo que parece una Corza Blanca (G.A. Bécquer)..
El Valle del Isuela desde el mirador de la Cruz de Canto
Inicio el descenso del puerto de montaña que sirve de acceso a Beratón desde Aragón junto al "agujero del viento" que me llevará hacia el surco que tan paciente ha ido labrando el Isuela y cuya regacha seguiré en dirección Purujosa, ya en la comunidad aragonesa.
La carretera a sufrido un empeoramiento notable, con baches de un palmo de profundidad, grava para parar un tren y un estrechamiento bastante acusado que me hacen extremar la prudencia en el descenso.

Una vez se suaviza el trazado puedo disfrutar del paisaje que me envuelve, teñido de los colores ocres y amarillentos que el otoño me ofrece.
Solo han pasado 10 interminables kilómetros desde que dejé Beratón y alcanzo el pueblo de Purujosa. Enclavado en la comarca del Aranda y colgado sobre las laderas de una montaña de la sierra del Tablado, cuenta con la curiosidad de ser el pueblo más pequeño del mundo con un semáforo. Y es que la entrada a este municipio de menos de diez habitantes es una empinadísima rampa en la que difícilmente pueden cruzarse dos vehículos.

Sigo mi camino a la vera del Isuela por la CV-630 tomo el desvío a Calcena, Trasobares y Tierga por la A-2302, donde el amplio paisaje excavado por el río se irá mostrando cada vez más seco y la carretera mucho más curveada. El tramo es entretenido en lo que a la conducción se refiere pues el tráfico es prácticamente nulo tanto en nuestro sentido como en el contrario.

Abandono la compañía del Isuela en Tierga y ahí tomo el desvío hacia Illueca por la A-1301. Misma tónica que en los últimos 40 kilómetros y por fín alcanzo una localidad de más de 300 habitantes, con su correspondiente gasolinera. No hay que olvidar que la despoblación en la comarca del Aranda (560 kms cuadrados) es sin duda uno de los ejemplos más graves que tenemos en la comunidad de Aragón, concentrando en las poblaciones de Brea e Illueca (más industrializadas) el 65 % de una población de poco más de 7.000 habitantes.
El valle del Isuela a su paso por algún lugar en la comarca del Aranda
Aparezco bajo la sombra del palacio del Papa Luna (Benedicto XIII) y de ahí continúo por la A-1505 hacia el Frasno, conduciendo 21 kms. junto al río Aranda, en una carretera ancha y curveada, pero con la presencia de bastantes coches que han decidido pasar el día en Illueca y aprovechar para comprar un buen par de zapatos. Ahí tomaré la autovía Madrid-Barcelona A-2 que me llevará durante 90 kms. hacia el muro de niebla que durante estos días escondió por completo Zaragoza.

La bajada de Beratón vista desde otro ángulo.



lunes, 7 de noviembre de 2016

LOS PUEBLOS NEGROS DE GUADALAJARA

Ruta por Los Pueblos Negros de Guadalajara -  270 kms.

Vista de los hayedos desde el Puerto de la Quesera

Sobre las faldas de la Sierra de Ayllón se encuentran asentados los llamados "Pueblos Negros" de Guadalajara. Ocupan su lugar en el mundo en la frontera entre Segovia y Guadalajara, en una zona agreste y despoblada. Estos pueblos han conseguido permanecer ajenos al paso del tiempo, por su condición de escondidos, sobreviviendo lejos del mundanal ruido sobre sus robustos y característicos muros de pizarra negra. Bajo la atenta mirada del pico Ocejón, siempre vigilante desde su privilegiada posición en las alturas,  las carreteras y los riachuelos serpentean entre impresionantes hayedos negros (como el de la Tejera o el de la Pedrosa) que en estos días de otoño presentarán una panorámica sencillamente espectacular.

Esta ruta la realicé el pasado domingo 30 de octubre, como segunda etapa (y plato fuerte) de mi salida otoñal coincidiendo con el puente de Todos los Santos.


A pesar del buen tiempo que hacía aquella mañana, la noche Soriana de Valdenebro (localidad próxima al Burgo de Osma que utilicé como campamento base) despertó con una buena helada sobre el lomo de la KTM (1050 Adventure). Tocó rascar y pasar un rato bastante fresco hasta que el sol se empezó a levantar lo suficiente como para que sus rayos lo fuesen calentando todo.
Rosada mañanera.


Atravieso el Burgo de Osma, en dirección San Esteban de Gormaz. Ambas localidades de gran importancia historico-artística que bien merecen una visita con tiempo y que forman parte del interesantísimo recorrido del Camino Del Cid (http://www.caminodelcid.org/).
En el mismo San Esteban (en un espectacular puente medieval que cruza el río Duero) tomaremos la N-110 en dirección a Ayllón, localidad de la provincia de Segovia que nos encarará hacia nuestro objetivo: Los Pueblos Negros de Guadalajara.

Esta carretera es una nacional amplia y bien asfaltada que nos llevará por un paisaje de riberas de hoja caduca hacia paisajes mucho más amplios, más en línea con el paisaje más típico que todos tenemos asociado a Castilla: interminables campos de cultivo que se extienden hasta donde alcanza la vista.
Como punto interesante en esta vía encontraremos una parte algo más entretenida en los Altos de Fuentecambrón, unas cuestas con alguna que otra curva que romperán la monotonía del camino.

Desvío a Majaelrayo.
Bordeo Ayllón sin salir de la N-110 y continúo dirección Riaza, donde a la altura de Saldaña de Ayllón el paisaje empezará a cambiar para empezar a mostrar su lado más verde. Paralelo al río del mismo nombre cruzo esta localidad y a través de un par de rotondas encaro hacia Riofrío de Riaza, localidad que alcanzaré en poco menos de 5 kms y a cuyos pies se despliega un pequeño embalse que bordearemos. La carretera que se nos presenta ya es otro cantar respecto a lo que hemos venido recorriendo. Además de sufrir un estrechamiento bastante acusado, los baches, parcheos y la falta de señalización de cualquier tipo se van a convertir en una constante hasta que alcancemos el Puerto de la Quesera.

Alto de la Quesera (vertiente segoviana)
Tomo la carretera dirección a Majaelrayo a través de la SG-112 y antes de que nos podamos dar cuenta la carretera pica hacia arriba en lo que son las primeras cuestas del Puerto de la Quesera (1.750 mts.). El ascenso se va  aprolongar durante los próximos 12 kilómetros y nos llevará hasta la delimitación de las provincias de Segovia y Guadalajara. En la subida me empiezo a cruzar con algún que otro animal doméstico que pasta tranquilo a un lado de la carretera y empiezan a proliferar los "Quaesitor Fungus" o buscadores de setas común. Los últimos tramos de la subida están un estado de conservación del asfalto bastante malo, pero en el momento en que coronamos la cosa mejora muchísimo y la "bajada" se hace mucho más llevadera.
Entrecomillo la palabra "bajada" ya que a pesar de que parece que hemos coronado el puerto, todavía nos faltan casi 30 kms de mandanga hasta llegar a Majaelrayo y en este tramo no solo vamos a encontrar bajadas pronunciadas, sino varios puertos secundarios que van a dar la sensación de que el puerto no termina nunca.
Riaza desde La Quesera

La vegetación del Hayedo de la Tejera Negra se extiende frondosa y cambiante a ambos lados de la carretera y cuando bajamos a lo hondo de los valles se puede sentir la humedad y el frío que se nos mete en los huesos. Toca extremar la precaución en ciertas zonas húmedas y sombrías, sobre todocuando nos topamos con algún que otro montón de hojas caidas agolpadas en la carretera. La GU-186 transcurre entre estas montañas de la Sierra de Ayllón con gran cantidad de curvas y muy poco tráfico en ambos sentidos.

Son muy curiosas las formaciones de roca que se divisan desde los altos que vamos coronando ya que en ocasiones recuerdan a fortificaciones o murallas naturales de piedra, como si estas poblaciones se encontrasen guarecidas por la propia naturaleza.
Tal y como vamos avanzando, dichos muros de piedra mostrarán cada vez más el color negro de la pizarra, el material más abundante y utilizado en la zona para todo tipo de construcciones.
Como curiosidad, cabe destacar que cuando nos estamos acercando a Majaelrayo (a 56 kms; es la última y única señal de tráfico que recuerdo haber visto desde Riofrio de Riaza) el puerto se muestra en un par de tramos tal y como fue pavimentado originalmente con hormigón rayado (y no con asfalto) y se convierte en una auténtica penuria para conducir con la moto con la suspensión botando y la cadena rebotando contra todos los embellecedores como si estuviesemos bajando por unas escaleras: literal. Creo que es en ese mismo momento cuando valoro deshechar la opción de cruzar la Gran Muralla China del Jarama, ya que esta está pavimentada con este tipo de material.
Camino a Majaelrayo

Tras infinidad de curvas, bajadas y subidas, por fín se suaviza la orografía del terreno (sin dejar ni un momento las curvas) y se empieza a vislumbrar el pueblo de Majaelrayo. Así mismo, también la vegetación da paso a matorrales más bajos y árboles de otro tipo, más aislados y de menos altura.

A partir de este punto podría decirse que entramos de lleno en los Pueblos Negros de Guadalajara y en este punto decido ampliar la ruta hacia el sur atravesando las localidades de Campillo de Ranas y Tamajón, donde bordearé una formación geológica que me recuerda muchísimo a la Ciudad Encantada de Cuenca. El recorrido, aunque más llano que en la primera parte, pero con el mismo trazado curveado que tanto hace disfrutar con la moto. Ahí mismo cogeré el desvío dirección a Valverde de los Arroyos (antes de llegar a Tamajón) que me llevará por una carretera espectacular perfectamente asfaltada y que en cierto modo nos va a servir para rodear el imponente pico Ocejón.
El Pico Ocejón desde Valverde de los Arroyos.

La GU-211 nos llevará hacia la localidad de Palancares no sin antes coronar el alto del mismo nombre (1.200 mts.) un puerto suave pero entretenido que como va a ser constante en todo este territorio no va a parar de sorprendernos con repechos y bajadas imposibles de contemplar como un solo puerto, pero que encadenadas van a hacer el trazado en un auténtico Disneylandia para la moto. Tras el alto llegaremos a Valverde de los Arroyos y desde ahí cruzaremos transversalmente hacia el este en dirección a Umbralejo, un pueblo deshabitado que en su día cayó en el abandono y que a partir de los años 80 se integró en el Programa de Recuperación de Pueblos Abandonados. Para llegar hasta este enclave bordearemos la montaña bajando hasta lo más hondo del valle que ha excavado el Sorbe entre pinares y sotobosque más seco y despoblado que en los territorios de la otra vertiente del Ocejón.

El Campanario de Galve
Nada más dejar a un lado Umbralejo (cuya ascensión también merecería un puerto digno de mención, ya que llegamos a plantarnos en 1.300 mts de altitud) engancharemos la CM-1006 hacia la Huerce. Esta carretera todavía es más ancha y está mejor asfaltada y nos lleva dirección norte con la carretera sin dejar de picar hacia arriba.
Como aquel que no quiere la cosa ya estamos en las primeras rampas del Puerto del Campanario de Galve, un puerto muy largo, con mejor carretera que la Quesera a pesar de tener una longitud parecida. A diferencia que este otro puerto, no cuenta con tantas curvas ni con cambios de porcentaje especialmente significativos, sino que las transiciones son más suaves, basadas en secciones más largas que serpentean en montañas de un tipo de orografía totalmente diferente, mucho más asentada sobre las faldas de las estribaciones del Ocejón.
El Campanario


Pasado Valdepinillos que queda en una hondonada, alcanzamos la altitud de 1.500 mts junto al punto geodésico y desde ahí iniciamos el descenso prácticamente en línea recta entre pinares altos hasta el pueblo de Galve de Sorbe. A partir de este pueblo (con su magnífico castillo) el terreno se suaviza y la vegetación se disipa hasta casi desaparecer dejando paso a largas praderas a ambos lados de la carretera en las que pasta tranquilo el ganado vacuno mientras un simpático potrillo que sale a recibirme a mitad de la carretera haciéndome parar de forma brusca. Bendito ABS y benditos Brembo...

Castillo de Galve de Sorbe
Conduzco entre enormes molinos de viento que giran cansinos entre los cambios de asfalto que iré sufriendo en "el área triestatal" de Guadalajara-Segovia-Soria. Especialmente en el territorio Segoviano la calidad del firme es de tercera regional y hay que andarse con mucho ojo en las curvas, ya que vuelve a aparecer la gravilla en un territorio más seco y dejado.

El cansancio empieza a pesar y alcanzo de nuevo Ayllón, esta vez por la CL-111. Podría haber tomado un par de desvíos anteriores por Montejo de Tiermes o por Noviales, pero prefiero volver a Valdenebro por la misma carretera por la que he venido ya que desconozco la calidad de esas carreteras y no me la quiero jugar.
Límite Guadalajara - Segovia
Me sorprende al encontrar en Ayllón otra de esas placas de los Pueblos Más Bonitos de España y lamento no contar con más tiempo para hacerle una visita, pero estoy seguro de que volveré por ahí a conocer sus tesoros (http://www.ayllon.es/turismo) y ya de paso al cercano yacimiento de Tiermes cuando el buen tiempo lo permita...

Desde ahí, regreso por la N-110 de nuevo por San Esteban y su puente y de ahí al Burgo de Osma. Han sido aproximadamente 4 horas de ruta y 270 kilómetros y toca descansar.



Conclusiones de la ruta:

Sin duda alguna los Pueblos Negros constituyen un auténtico paraiso para el disfrute de las rutas en moto con muchas variantes y añadidos como la Muralla China del Jarama, La Hiruela y un sin fín de carreteras secundarias que descubrir... Por el camino me cruzo con bastantes moteros que dan buena cuenta de ello y es que la cercanía con Madrid es de apenas 150 kms, así como con la propia Guadalajara o Segovia capital.
Recomendable al 100% tanto para la moto como para descubrirlo en otras formas de turismo rural mas activas.








Otra de la Quesera



Majaelrayo dirección pico Ocejón



Detalle Pueblos Negros




KTM 1050 Adventure


Camino a Majaelrayo




La ruta en vía Michelin:

https://www.viamichelin.es/web/Itinerarios?departure=42313%20Valdenebro&step-1=Riaza&step-2=19223%20Majaelrayo&step-3=19224%20Valverde%20de%20los%20Arroyos&step-4=19275%20Galve%20de%20Sorbe&step-5=40520%20Ayll%C3%B3n&step-6=El%20Burgo%20de%20Osma&arrival=42313%20Valdenebro&index=0&vehicle=4&type=0&distance=km&currency=EUR&motorway=false&toll=false&vignette=false&orc=false&crossing=true&fuelCost=1.6&allowance=0&corridor=&departureDate=&arrivalDate=

miércoles, 2 de noviembre de 2016

EL MONCAYO

Alfajarín - Valdenebro (por el Moncayo) - 253 kms.

El pasado domingo 30-10-2016 inicié la primera de las tres etapas de la Ruta que realicé aprovechando el buen tiempo que nos ha acompañado en este puente de Todos los Santos. En total, una tirada de casi 800 kilómetros repartida en 3 días, sin forzar mucho la maquinaria y sin madrugar demasiado, ya que tanto en Zaragoza como en Soria, las primeras horas de las mañana resultaron ser bastante bordes en lo que a condiciones meteorológicas de refiere, entre nieblas (Zaragoza) y alguna que otra helada (Soria). Por lo demás, en cuanto el reloj marcaba las 10:00 de la mañana, podíamos gozar de unas temperaturas muy agradables con las que poder disfrutar de la ruta sin preocuparnos de placas de hielo, ni zonas húmedas especialmente preocupantes.



El recorrido elegido para el primer día ha sido una ruta muy asequible, cercana a Zaragoza, entretenida, variopinta y que en mí caso me ha servido, como enlace con la vecina provincia numantina a través de una montaña rodeada de leyenda: el Moncayo.

Muchas son las historias que se han relatado acerca del origen del Moncayo, una de ellas asegura que este enorme monte de tres picos no es otra cosa sino la tumba del gigante Caco, el cual murió a manos del mismísimo Hércules.
Los Celtíberos por su parte contaban a la luz del fuego la historia de los tres hijos del rey de la tribu, los cuales, cegados por la codicia y la envidia lucharon por disputar la futura herencia del trono y las riquezas que ostentaba su anciano padre, todavía rey. Este, harto de las pugnas y guerras que sus hijos emprendieron entre sí, decidió recurrir al brujo de la tribu, el cual los hechizó convirtiéndolos en enormes moles de piedra que quedaron inmortalizadas para la eternidad en forma de los principales picos del territorio celtíbero: el Moncayo, el Ocejón y el Alto Rey. Y ahí, desde sus cimas, quedaron condenados a mirarse con vergüenza por siempre jamás...

La KTM (1050 Adventure) y yo nos ponemos en marcha desde mi pueblo, Alfajarín, con una niebla bastante molesta, pero de la cual confío en despegarme tan pronto como me aproxime a las faldas del Moncayo. La humedad se mete en los huesos y en apenas una veintena de kilómetros se empieza a empañar todo y los guantes han absorbido ya demasiada humedad.
Para ello, he escogido un recorrido bastante más agradecido para la moto que el habitual y me he decantado por la carretera de Pozuelo de Aragón que tomaré en el cruce de Pedrola (A-1303). En su primer tramo, más cercano al canal y no muy alejado del embalse de la Loteta me tocará verme las caras con la niebla más espesa con la que he tenido que lidiar, obligándome a parar para poder quitarme las gafas totalmente empañadas, ya que entre el vaho de la pantalla y las gafas como un cristo, daba gusto verme conduciendo como el Mortadelo en la Vespa. 15 - 16 kilómetros bastante malos.

Cruce de Pozuelo a Borja.

Alcanzo la localidad de Pozuelo y ahí giro hacia la derecha, en busca del Campo de Borja y para mi sorpresa, en apenas 2 - 3 kms. me quitaré por completo la niebla de encima.
El sol nos calienta y la KTM y yo nos venimos arriba alcanzando Bureta, Ainzón y Borja. Ahí, engancho en el cruce con la N-122 y me planto en el Mesón del Aceite, en Bulbuente, donde aprovecharé para almorzar algo, echar algo caliente para templar el cuerpo y cargar las pilas.
Poco más adelante, le tocará cargar el buche a la KTM en una gasolinera no muy lejos de ahí donde coincido con bastantes moteros que están de concentración.

La niebla empieza a disiparse camino a Borja.

La carretera es ancha y está bien asfaltada, la mañana acompaña y el depósito está lleno, por lo que me decido a afrontar el plato fuerte de la jornada. En seguida alcanzo el cruce de Vera de Moncayo y ahí tomo la carretera que atraviesa el pueblo hasta el Monasterio de Veruela donde aprovecho a tomar un par de fotos en plan "portada de la Moto Verde".
Monasterio de Veruela.


El Monasterio de Veruela es una abadía cisterciense del S. XII. Dentro de dilatada historia enclavada en los albores del reino de Aragón, cabe destacar a su huésped más importante, Gustavo Adolfo Becquer, el cual escribió sus famosas "Cartas desde mi celda" mientras trataba la tuberculosis que sufría. Así mismo, también son dignas de mencionar las "Rimas y Leyendas" que compiló, muchas de ellas inspiradas por el folclore y la tradición tan latente que existe en las tierras del Moncayo.

Tomo el desvío que hay justo en frente del Monasterio y que nos llevará de lleno al corazón del Moncayo. Se trata de una pista forestal asfaltada y de una anchura y un estado de conservación bastante aceptables. Comienza el recorrido entre carrascas, pinos y robles, suave y con ligera pendiente hacia arriba. Tal y como vamos ganando altura, el paisaje cambia de forma radical y nos introducimos en un hayedo que en pleno otoño (estación en la que estamos, aunque parezca mentira...) nos va a mostrar toda una carta Pantone de tonos amarillos, naranjas y hasta rojizos.

Cruce al Moncayo en Veruela


Las ramas de los árboles son largas y algunas llegan a invadir parte de la carretera. Es preciso tener cuidado para no llevarse un golpe en el casco. También hay que tener cuidado con los montones de hojas caidas que se amontonan en las curvas, la humedad se acumula bajo ellas y puede hacernos dar un buen patinazo. Otro de los factores de riesgo que vamos a encontrar es una especie invasora conocida como el "quaesitor fungos", lo que viene a ser el "buscador de setas común"· Se le puede reconocer porque recorre el Parque Natural del Moncayo con una cesta debajo del brazo mirando al suelo y sin prestar excesiva atención a la vía asfaltada por la que circulan el resto de vehículos. Dicho "buscador de setas común" es una especie que en ocasiones va acompañado de un perro suelto y que acostumbra a circular con su Dacia Duster (qué ha pasado con ese coche?? Lo regalan???) como si la vía fuese de un solo sentido (el suyo, of course).


Siguiendo la pista forestal que cruza el Moncayo nos iremos encontrando sucesivamente el cruce de Añón y después el de Litago; opciones muy válidas para complementar o ampliar esta ruta.





Llego a la zona de Agramonte (previamente habremos pasado unas zonas de Pino albar espectaculares), la cual está petada de gente y ahí tomo el desvío en forma de descenso hacia Vozmediano por la SO - 382, que me llevará a la vertiente soriana del Moncayo, en una carretera amplia y con buenas curvas. Se cumple una vez más la máxima de que los sorianos nos dan un repaso en lo que a estado de conservación de carreteras (por secundarias o terciarias que sean) a los aragoneses. Señores políticos, ¡tomen nota de esto y no de las tontadas! A veces parece que se les olvida que dichas vías de carácter secundario unen poblaciones donde viven personas, por pocas que sean y merecen tener unas carreteras que cumplan un mínimo de seguridad.


El Moncayo desde Vozmediano
Continúo hacia Ágreda y ahí engancho con la N-122 que hemos dejado atrás en Veruela. Misma tónica que en el tramo aragonés: carretera nacional ancha, poco transitada y con el firme en muy buen estado. Antes de llegar a Soria capital deberemos salvar la cuesta de Omeñaca, así como el puerto del Madero, que nos ofrece una vista espectacular de la Tierra de Ágreda con el Moncayo de fondo.


Una vez ahí, entraré en la imponente circunvalación de Soria Capital (que bien podía ser la circunvalación de Los Angeles, o Nueva York,...) en la que siempre me viene a la cabeza el estribillo de Gabinete Caligari "Camino Soria" y de ahí dirección al Burgo de Osma, con parada técnica en Calatañazor para descansar un rato y tirar un par de fotos.

Calatañazor

Una vez dejemos atrás Calatañazor (donde Almanzor perdió el tambor y cuya historia cuento en otra entrada de este blog: http://avueltasconlamoto.blogspot.com.es/2016/08/cameros-la-cebollera-y-el-corazon-de_1.html ) y nos encontraremos con el alto "el Temeroso".

Estos últimos altos no implican ninguna dificultad, simplemente habrá que estar bien despierto, ya que llevamos buen rato en rectas y tramos monótonos y de repente toca salvar un par de curvas en pendiente que nos pueden pillar en bragas o quizá un poco pasados de vueltas y darnos algún que otro susto. Estos altos que nos encontraremos nos van a ir introduciendo de forma progresiva en el desnivel positivo de hasta 1.000 metros ya que no se nos debe olvidar que poco a poco estamos subiendo a la meseta.

Finalmente alcanzo el Burgo de Osma entre tramos de obras de lo que será la autovía del Duero y desde ahí, por la CL-116 dirección Almazán, Valdenebro, donde instalaré campamento base para las siguientes dos jornadas que echaré en tierras de Castilla.


Vista en detalle del recorrido por el Moncayo


La ruta en Guía Repsol: https://www.guiarepsol.com/es/mapa/r/?lat=41.61250352053137&lon=-2.9042537173461325&zoom=13&A=Alfajar%C3%ADn%2C%20Zaragoza%2C%20Espa%C3%B1a&pA=ChIJt6VVipQYWQ0R8oW9A-VWeU4&B=Pozuelo%20de%20Arag%C3%B3n%2C%20Espa%C3%B1a&pB=ChIJy9aV1GnPWw0RY_JjLlSkLtc&C=Vera%20de%20Moncayo%2C%20Espa%C3%B1a&pC=ChIJWZh5xAiuWw0RLVEYFvnUPig&D=Vozmediano%2C%20Soria%2C%20Espa%C3%B1a&pD=ChIJpXtROrwAWw0RAFj1WgeHBQQ&E=Valdenebro%2C%20Soria%2C%20Espa%C3%B1a&pE=ChIJnZePK2jtRA0R4Fb1WgeHBQQ&card-closed=1&recs-closed=1&map-type=hybrid





sábado, 3 de septiembre de 2016

Sierra de Gudar y el Maestrazgo

Sábado 03 de septiembre de 2016



"Teruel Exisite"... ¡Joder que si existe!

Resulta irónico encontrarte una pegatina de esas que llevan en los salpicaderos muchos coches tulorenses (y simpatizantes) que reza esa famosa frase ya conocida por todos de "Teruel Existe!" cuando estás llegando a casa después de meterte entre pecho y espalda una ruta como la de hoy.

Un par de semanas antes comencé a perfilar el borrador del proyecto de ruta que tenía para hoy y he de decir que en pocas ocasiones me las he visto y me las he deseado tanto para hacer una ruta en la que se pudiesen lucir tantas posibilidades como las que ofrece al visitante la provincia bajo aragonesa.

Sobre la mesa se planteaban 2 grandes opciones que como si por un capricho de la red de carreteras del estado se tratase se veía claramente diferenciada por el trazado de la Autovía Mudejar haciendo las veces de muga. A un lado la ruta "Teruel Oeste - Albarracín - Javalambre" y  al otro "Teruel Este - Gudar - Valdelinares".
Dos lados de la carretera, dos serranías del sistema ibérico, dos estaciones de esquí... En definitiva, dos rutas espectaculares entre las que tocaba decidir.

He de decir que como suele suceder más a menudo de lo que nos gustaría reconocer a los moto-ruteros, a la hora de la verdad las cosas nunca salen como uno quiere y en ocasiones (pocas, gracias a Dios!) los plenes se trastocan y como diría la tía del Tom-Tom toca eso de "recalculando ruta..." que tanto nos fastidia escuchar. Y esta ocasión no ha sido moco de pavo y es que he sufrido un tirón considerable en la espalda justo cuando coronaba Allepuz (a unos 270 kms de casa), a 1 kilómetro escaso del cruce donde arrancaba una espectacular ruta que juro (palabra!) volveré para completar en su totalidad. Aún asi, con la espalda hecha mierda y subiendo y bajando de la montura cual John Wayne en sus últimos escarceos en el cine he tratado de improvisar de la forma más completa posible esta ruta que se ha visto reducida en 180 kilómetros respecto a su trazado original. Una pena...

ETAPA 1 - Zaragoza - Cedrillas (210 kms)


Bien temprano (a las 8:15, para ser más exáctos) aprovechando la poca fresca que nos iba a dar el día me pongo en marcha hacia la carretera de Teruel intercalando tramos de la Autovía Mudejar (A-23) con la antigua carretera de Teruel (N-330) para hacer el magnífico puerto de Paniza que ya hemos realizado en alguna otra ruta y que tanto nos gusta recorrer dado el prácticamente nulo flujo de tráfico que se ha visto reducido a la mínima expresión monopolizado por las dos ruedas tanto de motoristas como de ciclistas.

Continúo hacia Daroca, San Martín del Río, Báguena, Burgáguena (La Bur) hasta Calamocha donde me incorporo a la autovía ante la ausencia de atractivos adicionales en la vía.

Tras unos 80 kilómetros aburridos y con muchos coches alcanzo las inmediaciones de Teruel y desde ahí la salida dirección Cedrillas - Cantavieja que me llevará a la A-226, una carretera en la que prácticamente desde el minuto 1 empieza el primer atractivo de la ruta: El Puerto de Cabigordo (1.600 m).


Se trata de un puerto con una subida bastante interesante, con una carretera bastante bacheada al principio, pero que mejra sensiblemente. En cuestión de minutos, el paisaje arrasado y seco empieza a entrever los primeros árboles.

La bajada es bastante entretenida también y nos mete de lleno en harina al alcanzar el pueblo de Cerdillas.





ETAPA 2 - Cedrillas - Cantavieja (70 kms)


Hago un alto en el camino para almorzar algo y dar un último repaso a la ruta, pero sufro un tirón en la espalda justo antes de arrancar hacia "LA RUTA" (con mayúsculas y todo!) por lo que no me quedan más narices que regresar a casa dejando atrás los 180 kms de puertos que me ofrecía la ruta "en 8" que me llevaría de Alcalá de la Selva a Valdelinares pasando por Fortanete, Linares de Mora, Mora de Rubielos para terminar en la otra cara del puerto de Valdelinares.

Toca improvisar para volver a casa y tiro dirección Cantavieja por Alleuz en la misma A-226. NO entraba en mis planes volver a visitar el Maestrazgo hoy, pero he de decir que hoy se ha cumplido eso de que "no hay mal que por bien no venga".Es una bastante buena, con curvas que serpentean excavadas en la roca de la montaña. Me decido a continuar hacia Villaroya de los Pinares, pero en apenas 2 kms veo un cartel que me indica: "16 km Valdelinares; 1.898 mts; pueblo más alto de España" y aunque el dolor es insoportable me decido a acometer la carretera TE-V-3. El firme es muy estrecho y no se encuentra en las mejores condiciones que uno desearía, pero tal y como se gana cota de altura, el paisaje va devolviendo palmo a plamo lo que había ido a descubrir en estas tierras: el corazón de la Sierra de Gudar.
Corono la cima de Valdelinares - Sollavientos (1.828 mts) y aprovecho para tirar un par de fotos. Desde ahí arriba continúo hacia Fortanete por una carretera bastante solitaria (y que misteriosamente obvian varios mapas de carreteras) que me ayudará a conectar la cima con la localidad de Fortanete.
En mitad de esa carretera, casi escondido se encuentra uno de los gigantones de la ruta, El Tarrascón de Peña Cerrada (1.810 mts.), el cual nos ayudará a descender la comarca de Gudar-Javalambre y nos servirá de puerta así mismo al imponente Maestrazgo. La bajada tiene porcentajes altísimos (casualmente estaban grafiteados en el suelo y mostraban desniveles de hasta el 17%)

La carretera serpentea con el río Pitarque hasta encaramarse a todo un balcón natural que nos ayudará a situarnos geográficamente como hace el puerto de Cuarto Pelado (1.657 mts) cuya bajada, paralela al imponente y tan característico barranco que ha labrado el río Cantavieja nos acompañará hasta la población del mismo nombre.
















ETAPA 3 - Cantavieja - Zaragoza (207 kms)


Cantavieja es uno de esos pueblos con la placa de los "Pueblos más bonitos de España". Y me parece digno de destacar el hecho de que junto a Cantavieja haya otras 5 localidades turolenses que compartan dicho título (véanse: Albarracín, Rubielos de Mora, Puertomingalvo, Valderrobres y Calaceite). Hasta aquí todo normal, ¿no? Pero quizá ese dato se hace mucho más interesante cuando se tiene en cuenta que dicha lista la componen tan solo 35 pueblos de toda España. Más pruebas de que Teruel existe!!





Rodeo Cantavieja direción Castellote por la A 226. Es fascinante observar no solo en elclave natural en el que se encuentra Atravesaré Mirambel que luce un asfaltado tan nuevo que apenas tenía la señalización horizontal pintada,entraré por unos kilómetros en la Comunidad Valenciana por una carretera no tan buena (Olocau del Rey) y regresaré de nuevo a Aragón por la misma vía hacia Bordones. La carretera está curveada, el asfalto decente y se puede correr un poco más y disfrutar del trazado.




Para mi sorpresa descubro un embalse que contrasta con todo lo visto hasta ahora en la ruta y cuyas aguas turuqesas me recuerdan a las de Yesa. Se trata del embalse de Santolea (el cual bordea la carretera y se puede disfrutar en un porrón de kilómetros)el cual embalsa las aguas del río Guadalope.





De ahí, alcanzo Castellote y poco más adelante, con la misma tónica tanto de recorrido como de estado de conservación de la carretera (ahora la A 225), abandonamos el Maetrazgo para entrar en la comarca del Bajo Aragón.

Entre Mas de las Matas y Alcorisa salvaremos una sierra (cuyo nombre desconozco) y sobre la cual se alza el Alto del Caballo (739 mts) y desde ahí ya enfilaremos hacia Andorra y Albalate del Arzobispo en una carretera bastante ligera.

En Albalate pararé a descansar y a repostar y desde ahí a casa por Belchite sufriendo en los últimos minutos de esta ruta de casi 500 kms y algo más de 6 horas con un lumbago insoportable.

Conclusiones de la ruta:

Tal y como indicaba al principio, Teruel, no es que no exista, sino que además de existir es una provincia con infinidad de lugares que visitar, tan dispares entre ellos que la convierte en una curiosa amalgama.

Me propongo regresar tan pronto que me recupere para recorrer esta ruta tal cual la había planteado en un principio, así como su homóloga de la vertiente este.











lunes, 1 de agosto de 2016

Cameros, La Cebollera y el corazón de Soria

Tras un largo parón marcado por el invierno, los compromisos y demás movidas que no vienen al caso vuelvo a estas líneas a dejaros una de las rutas que más ganas tenía de realizar: "Cameros, La Cebollera y Soria".
Como principal novedad respecto a las rutas del año pasado será la absoluta protagonista de todo esto. Con mucha pena y una veintena de miles de kilómetros sobre su manillar, nos despedimos de la Triumph Bonneville América para dar paso a un salto al mundo de las Maxi-Trail: la KTM Adventure 1050.

Tras un par de pruebas en tierras de los Monegros y comprobar el agarre, la frenada y los pulmones con los que cuenta esta campeona oriunda de Mattighoffen, de la mano del verano le llegaba la hora de demostrar lo que vale en una ruta larga.

Así pues, no ha sido para menos, ya que esta ruta, fragmentada en 3 etapas (Zaragoza - El Burgo de Osma, Valdenebro - Valdenebro y El Burgo de Osma - Zaragoza) ha sumado más de 820 kms en los que hemos tenido un poco de todo. Buenos puertos, carreteras sinuosas, partes rápidas, paisajes singulares y en general, muy buenas sensaciones.






ETAPA 1: Alfajarín (Zaragoza) - El Burgo de Osma





La primera etapa, como dirían los "pro" acabó quedándose en una etapa de enlace, pues el recorrido Zaragoza - El Burgo, desde Borja a Soria capital fué pasado por agua, lo que me llevó a descartar la ruta que quería haber hecho en un principio en pos de llegar lo antes posible al "campamento base" en el que pasaría el fin de semana. Así pues, mero trámite por nacional sin ningún aliciente que destacar.
241 kilómetros bastante ligeros por carreteras nacionales (232 y 122) en bastante buen estado. Una pena lo de la lluvia a la altura de Borja y hasta Soria capital. En un principio me había planteado la idea de coger la carretera de Pozuelo y evitar la 232, pero la ruta comenzaba a las 17:00 de la tarde tras una jornada laboral cañera y cada minuto contaba para no llegar de noche al destino.




ETAPA 2: Valdenebro - Valdenebro (Por Soria, Piqueras, Sierra de Cebollera, Cameros, la ribera del Duero y el cañón del río Lobos)





1 - Enlace:

Valdenebro es un municipio de apenas 90 habitantes que se extiende a la vega del río Sequillo sobre las faldas de un cerro desde el que se divisa una extensa masa de pinares. Es un lugar tranquilo, de tierra rojiza y clima fresco que me servirá como campamento base en mi ruta soriana. Me despiertan las campanas del ayuntamiento a eso de las 8:00 y  antes de las 9:00 de la mañana ya estoy en dirección al Burgo de Osma para tomar desde ahí dirección a Soria capital. Mientras en el resto de España se están asando (40 grados en Zaragoza!!) pillo la moto completamente mojada por la rosada que ha dejado el fresco de la noche; (empezamos bien!) con una temperatura agradable. Este primer enlace de 62 kilómetros por la N-122 (actualmente en obras en vista a convertirse en una autovía) atraviesa un pequeño puerto de montaña y una serie de localidades entre las que destaca por su castillo y su conjunto histórico artístico Calatañazor donde como bien dice el romance "En la Calatañazor, perdió Almanzor el  tambor" (vamos, que las tropas de Sancho Garcia les dieron ferrete a los moros).
Alcanzo Soria completando el enlace de 62 kms y tras un par de rotondas en dirección al polígono "Las Casas" - Logroño cojo el enlace de la N-111.

Se trata de una carretera nacional bastante ancha y bien asfaltada que según avanza hacia el norte va haciendo su trazado más revoltoso y curveado, pero conservando una inmejorable calidad en el firme.
Pasaremos junto a la localidad de Garray, municipio donde se asienta el mítico cerro (hoy en día propiedad de la familia Marichalar), sobre el cual, la resistencia celtíbera frente al asedio romano se llegó a convertir en leyenda.

2 - Piqueras:

En apenas 40 kilómetros la carretera se empieza a empinar hacia arriba, lo cual quiere decir que ya hemos llegado al "gigantón" de la ruta; nada más y nada menos que el puerto de Piqueras (1700 metros). Una subida muy bien asfaltada y con un trazado entretenido para recorrer con la moto. Tras coronarlo te das cuenta que la parte soriana es mucho menos agresiva y está mejor cuidada que la Riojana, pero sin duda es un puerto para disfrutarlo con mayúsculas. Uno de los detalles que lo hace más especial es la existencia de los Túneles de Piqueras, una alternativa subterránea para aquellos que buscan simplemente pasar de un lado a otro, lo cual nos deja a ciclistas y a motoristas prácticamente su uso en exclusividad.


Una vez arriba se puede divisar la frondosidad de los árboles que aterciopelan el Parque Natural de la Sierra de Cebollera y no pierdo la oportunidad de tirar un par de fotos en plan catálogo novedades 2016; (http://www.sierradecebollera.com/).
Tras la bajada por la parte riojana con un firme bastante peor que el de la parte soriana, llegamos a una zona de curveo suave y rápida hasta la localidad de San Andrés (La Rioja) donde poco antes tomaremos el desvío a la LR - 250.



3 - LR - 250 (Leza-Jubera)

La primera sensación que te da al tomar esa carretera es pensar muy seriamente en dar media vuelta. A diferencia que en las carreteras sorianas, esta es una vía de apenas 2 metros y medio de ancho, totalmente parcheada que hace de la conducción (incluso con una trail) un auténtico suplicio.
Sin ningún tipo de valla, mantenimiento o seguridad, esta carretera serpentea junto al río Leza en la denominada ruta "Leza-Juberre" entre árboles, hojas caidas y una gran cantidad de animales pastando a uno y otro lado de la carretera, llegando incluso a tumbarse en mitad de la vía.
Es curioso descubrir cómo la gravilla en las curvas pasa a ser algo secundario, cuando descubres el peligro de las mega-güeñas que hay en las curvas (bendito control de tracción de la KTM!!!).
En un recorrido que se hace interminable se cruza el puerto de Sancho Leza (1400 m) con unas curvas criminales en el que seguro será el peor puerto de los que acometeremos en esta jornada.

En unos kilómetros se alcanzan las localidades de Laguna de Cameros, Cabezón de Cameros y Jalón de Cameros, donde justo a la entrada del pueblo debemos tomar una curva cerradísima que nos llevará a Muro en Cameros y que nos ayudará a cruzar transversalmente la comarca riojana del mismo nombre.

4 - LR - 245

Nada más tomar el desvío, percibimos cómo la carretera mejora muchísimo y de qué manera empieza a inclinarse hacia arriba.
Rampas importantes, con buenas curvas y un trazado muy bueno que nos llevarán a Muro en Cameros entre pisadas y otros vestigios que los dinosaurios dejaron ahí grabados por los siglos de los siglos amén. Entre las localidades de Muro y Almarza de Cameros subiremos el alto de la Rasa (1.390 m), todo un puertazo que se disfruta como pocos en esta ruta.

5 - Peña Hincada



Llegaremos al final de la LR - 245 para conectar con la N-111 (en el mismo tramo que hubiésemos recorrido tras la bajada de Piqueras).
Un tramo de enlace puro y duro hasta Villanueva de Cameros. Ahí cogeremos durante un tramo corto la LR - 253, una carretera rapidísima, amplia, copn curvas y un buen asfaltado que bordea el pantano de Gonzalez-Lacasa hasta llevarnos a Ortigosa de Cameros en dirección Brieva de Cameros (LR - 332).


 Esta carretera, más floja que las dos anteriores va a atravesar otro de los gigantones de la ruta, el puerto de Peña Hincada (1425 m). Este puerto destaca por el cambio radical que da el paisaje, pasando a una zona agreste y sin apenas vegetación, surcando grandes moles con rampas largas y pronunciadas. Tras la bajada pronunciada en presencia de un par de buitres (es de justicia aclarar que no me cruzo con apenas ningún coche en lo que llevamos de ruta, por lo que me empiezo a  sentir bastante solo y me conformo con la compañía del carroñero volador por antonomasia) alcanzo Brieva de Cameros.






6 - Montenegro de Cameros

Tras cruzar Brieva, continúo hacia el este por la LR - 113 en una carretera estrecha, pero muy entretenida que bailotea encerrada en un valle junto al río Najerilla. Empieza a apretar el calor y no me iría mal un remojón, mientras tanto, la humedad es creciente y la presencia de mosquitos, mariposas y demás insectos voladores acaban convirtiéndose en mi almuerzo cada vez que me lavanto la pantalla del casco.
Continúo hasta el enlace con la LR - 333 dirección Viniegra de Abajo y Viniegra de Arriba (es curioso que la de Abajo está arriba y la de arriba está abajo, pero este tema lo discutiremos otro día). La carretera tiene un millón y medio de curvas y el tráfico en  ambos sentidos es prácticamente nulo, ante lo cual la conducción gana enteros, permitiendo abrir gas y gozándolo en las curvas como un jabalí en un charco de gasoil.

Cruzo Viniegra de Arriba muy optimista y muy contento por el estado general de las carreteras y me doy de frente con un par de kilómetros de asfalto levantado y obras en la carretera donde no echo para nada de menos mi Triumph.

Continúo en dirección Montenegro de Cameros cruzando el puerto del mismo nombre (también llamado de las Viniegras) (1.583 m) al igual que en Peña Hincada, paisaje sin mucha vegetación, buen asfaltado, rampas largas y curvas interesantes. Le toca trabajar bastante al freno en la bajada tan acusada. La cima hace las veces de frontera entre La Rioja y Castilla Y León, por lo que volvemos a territorio Numantino.

7 - Santa Inés



En el mismo Montenegro cogemos dirección sur hacia las localidades de El Quintanarejo y Vinuesa. No sin antes subir el tercer y no por ello menos importante gigantón (en este caso gigantona) de la ruta. El puerto de Santa Inés (también llamado Punto de Nieve Santa Inés) (1.753 m) nos devuelve a la frondosidad y al verde que tan presente ha estado en esta ruta.
La subida es larga y la carretera bastante curiosa. Desde la cumbre se puede apreciar el imponente trazado que va rodeando a este monstruito de carretera de montaña que saca pecho junto a las estribaciones de sus hermanos mayores, los picos de Urbión.

Me detengo en la cima para sacar un par de fotos y caigo en la cuenta que está equipado con remontes y demás parafernalia para la práctica del esquí, así como toda clase de actividades de aventura (http://www.puntodenievesantaines.com/).









8 - Los Pinares

Tras descender Santa Inés, conduzco en dirección a Vinuesa para encontrarme de frente con el joven río Duero que fluye inconsciente hasta estrellarse contra la presa que retendrá su cauce en el embalse de La Cuerda del Pozo.
En dirección contraria a la de las aguas del Duero y entre Pinares atravesaré las pobleciones de Salduero, Covaleda y Duruelo (por la CL - 117) hasta alcanzar un enganche de 18 km que me llevará rumbo al sur hasta Navaleno.

9 - El Cañón del Río Lobos

En Navaleno engancho la N-234 dirección San Leonardo de Yagüe. Una nacional amplia y en buen estado. Se empieza a hacer creciente el tráfico en ambos sentidos y el cansancio, tras horas de ruta empieza a hacer mella.
En San leonardo cojo la SO - 920 en dirección Ucero. Esta carretera es la que nos hará cruzar el Parque Natural del Cañón del Río Lobos, una espectacular formación geológica de origen Kárstico que el cauce fluvial del mismo nombre ha excavado con paciencia sobre la roca caliza. Esta bella depresión calcárea aloja en su interior un gran número de especies vegetales y animales, así como también se convierte en un enclave muy importante para el desarrollo de actividades de aventura, senderismo, espeleología entre otras muchas disciplinas.
Tras una bajada fuerte con un par de curvas muy cerradas llegamos al entorno del camping que hay junto al nacimiento del río Ucero y desde ahí, en nada nos plantamos en la población del mismo nombre.

Continuamos por la SO - 920 prácticamente en una recta hasta El Burgo de Osma y desde ahí, en dirección Berlanga de Vuelta a Valdenebro.

Completamos la Etapa más importante de esta ruta tras 6 horas sobre la moto y 330 km recorridos.

ETAPA 3: Valdenebro - Zaragoza



Al día siguiente, tras disfrutar de la tranquilidad rural, los torreznos y el fresco que se respira en Valdenebro, descansamos y regresamos a casa.

La vuelta, tras el aborrecimiento del día anterior y la falta de alternativas entretenidas se hace por la Nacional en dirección Berlanga, Almazán, Ariza y hasta Zaragoza por la autovía. 220 kms.



Para ver la ruta en Via Michelin:
http://www.viamichelin.es/web/Itinerarios?departure=Soria&departureId=3aMTEya3oxMGNOREV1TnpZeU9EZz1jTFRJdU5EWTFNVEU9&step-1=26134%20Muro%20en%20Cameros&step-1Id=31M3poeDEwY05ESXVNakkxTVRrPWNMVEl1TlRJNE9Eaz0=&step-2=26124%20Ortigosa%20de%20Cameros&step-3=26329%20Viniegra%20de%20Abajo&step-4=Vinuesa&step-4Id=31NDE2eWIxMGNOREV1T1RFeE56VT1jTFRJdU56WXlOalk9&step-5=42158%20Duruelo%20de%20la%20Sierra&step-5Id=31M3Y3azEwY05ERXVPVFUwTWpnPWNMVEl1T1RNeU1Eaz0=&step-6=42149%20Navaleno&step-6Id=31M3ptMzEwY05ERXVPRE00TmpNPWNMVE11TURBMU16TT0=&arrival=42313%20Valdenebro&arrivalId=31NDE1cHoxMGNOREV1TlRjeE1ETT1jTFRJdU9UWTBNREk9&index=0&vehicle=4&type=0&distance=km&currency=EUR&avoidClosedRoad=false&motorway=false&toll=false&vignette=false&orc=false&crossing=true&fuelCost=1.6&allowance=0&corridor=&departureDate=&arrivalDate=